1. Objetivo.
Realización de un frotis de sangre para su posterior observación al microscopio.
2. Fundamento.
Los capilares son diminutos vasos sanguíneos que se encuentran, por norma general, cerca de la superficie de la piel. Nos extraeremos una pequeña muestra de dicha sangre con una lanceta y la recogeremos con un capilar para, sobre el portaobjetos, verterla sobre uno de los extremos del portaobjetos.
El frotis es una técnica para esparcir el espécimen por el portaobjetos utilizada para evaluar los glóbulos rojos (eritrocitos), glóbulos blancos (leucocitos) y plaquetas (trombocitos). Además, los frotis de sangre también se utilizan para detectar parásitos de la sangre tales como Babesia, Anaplasma y Trypanosoma. El frotis debe quedar tal que así:
Una vez la sangre esté seca sobre el porta, la teñiremos y visualizaremos en el microscopio. Éstos serán los componentes de la sangre que podremos visualizar:
3. Materiales.
- Lanceta.
- 2 portaobjetos.
- Panóptico rápido Nº1, 2 y 3 (colorantes).
- Frasco lavador con agua destilada.
- Microscopio.
4. Procedimiento.
Para extraer la muestra, pincharemos nuestro dedo presionando la parte superior de la lanceta -que estará apoyada sobre él- y, en caso de ser necesario, apretaremos el diámetro de nuestro dedo hasta que salga una gota de sangre. Con la otra mano haremos que la gota suba a través del tubo capilar.
Cuando esté contenida, daremos con el capilar pequeños toques en el extremo del portaobjetos hasta que haya una pequeña gota de la muestra sobre él.
Para realizar el frotis antes de que la gota se seque, utilizaremos otro portaobjetos.
Pasos para realizar el frotis:
- Colocamos perpendicularmente encima de la gota una de las bases del segundo portaobjetos (lado corto). La línea imaginaria que trazará la base del portaobjetos 2 debe ser paralela a la de la base del portaobjetos 1.
- Moveremos el portaobjetos 2 en dirección al extremo más cercano, sin cambiarlo de posición.
- Esperamos a que toda la sangre se extienda a lo largo de la base del portaobjetos y lo movemos en el sentido contrario.
Dejaremos la muestra secar en el portaobjetos durante aproximadamente 5 minutos. Mientras tanto, prepararemos sobre la superficie de trabajo los colorantes en orden y el frasco lavador.
Cuando esté seca, teñiremos 5 veces con el panóptico rápido Nº 1, otras 5 veces con el panóptico rápido Nº 2 y 3 veces con el Nº3. Para teñir, tan solo tendremos que coger el portaobjetos de un extremo y sumegirlo tantas veces como hemos mencionado.
Sobre el portaobjetos quedará exceso de colorante que arrastraremos y desecharemos vertiéndole agua destilada.
Dejaremos secar y, finalmente, tendremos nuestra muestra lista para observar.
Observamos en el microscopio las muestras y vimos lo siguiente:
Aumento 10x
Aumento 40x: visión de neutrófilos.
Aumento 100x:
A 100 aumentos no encontramos algo fuera de lo común. No obstante, si pudimos observar diferentes cuerpos celulares de la sangre de nuestra compañera Almudena:
5. Consideraciones de seguridad.
No deberemos aplicar mucha presión sobre el portaobjetos a la hora de hacer el frotis, así como tendremos que estar atentos a que los objetivos del microscopio no topen con el mismo. El exceso de presión podrá romper el portaobjetos y echar a perder la práctica, además de provocar posibles fisuras en la lente del objetivo.
Atenderemos al riesgo eléctrico de la toma de corriente del microscopio evitando que entren en contacto las manos o conductores eléctricos directamente con la toma. También evitaremos usarlo con las manos mojadas, sobre todo en la operación de enchufe y desenchufe, o la entrada de agua al sistema eléctrico.
Los colorantes deberán estar el mínimo tiempo posible sin la tapadera, pues parte de su composición es alcohólica y se evaporarán con facilidad.
6. Gestión de residuos.
Como todos los residuos tendrán o serán restos biológicos, deberemos de desecharlos en el contenedor de residuos biológicos.
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